¡BIENVENID@S DE NUEVO! ¿Pensabais que me había olvidado de vosotr@s? ¿Qué después de unos meses de relax me estaba haciendo la remolona? ¡De eso nada! El Especiero de Patricia comienza hoy su nueva temporada con mucha fuerza e ilusión y además, con ganas de más. Más recetas, más trucos de cocina, más artículos interesantes y más ganas de vosotr@s. ¡Sí! Os he echado de menos y creo que ya va siendo hora de ponernos al día, ¿verdad?
¿Qué tal lo habéis pasado este verano? ¿Qué lugar habéis elegido para pasar las vacaciones ¿Habéis descubierto algún plato estupendo y novedoso que merezca la pena compartir? ¡Contádmelo todo, por favor! Por mi parte no puedo quejarme. He pasado un verano genial, alternando playa, montaña, excursiones, ocio, relax y por supuesto, también gastronomía. Estoy preparando un post con alguna receta interesante con la que me he topado este verano, así que en breve os iré contando.
Me da pena decirlo (ya sabéis lo que me gusta el calorcito), pero a estas
alturas me temo que va siendo hora de comenzar a decir “bye, bye” a las
vacaciones y también al verano. ¿No os da la sensación de que cuando llega
septiembre, así como quien no quiere la cosa, de un día para otro nuestra vida
se revoluciona? Justo hasta el día anterior nos levantábamos relajados, con un
montón de planes divertidos para hacer durante el día y por qué no, también por
la noche; con esa sensación maravillosa de no tener prisa, de olvidarnos por
completo del reloj; de disfrutar a tiempo completo de unas semanas en cualquier
destino maravilloso con familia, hijos, amigos o con nuestra pareja, ¡vamos!
la mejor recompensa después de todo un año de trabajo. Sin embargo, es llegar
septiembre y como si Chucky (¡sí!, el de “El muñeco diabólico”) se hubiera
apoderado de nuestras mentes, vuelven sin anestesia las prisas, los madrugones,
el atasco, el trabajo y en definitiva, la vuelta a la normalidad.
¡Pero no desesperemos! Estoy
segura de que los recuerdos de lo vivido durante los últimos meses nos harán
más llevaderos los días que vienen por delante, ayudándonos a poner en “modo on” nuestra mente, llenándola con
nuevos proyectos e ilusiones que nos permitan trabajar duro durante el otoño e
invierno para, en cualquier momento, volver a pensar en organizar otras
estupendas vacaciones.
Hoy, como todavía hace calor y
para que no decaiga el ánimo, os traigo un plato típicamente veraniego. Un
gazpacho. Sí. Pero diferente. A decir verdad sólo se diferencia del original en
que incluye un ingrediente nuevo, fresco, muy típico en las fechas veraniegas,
que además es una fruta: la sandía. Yo también soy novata en esto del gazpacho de sandía, porque lo he probado por primera vez hace bien poquito, pero os lo aconsejo porque que me ha dejado muy buen sabor de boca. ¡Ya veréis! Tiene un toque dulce muy
original que lo convierte en un entrante muy fresco y sobre todo, distinto.
La sandía es una planta
originaria de África que tiene una gran presencia y difusión en Asia, aunque
hoy en día se cultiva por todo el mundo. Su fruto es un pepónide de enorme
tamaño que puede alcanzar hasta 122 kilos de peso, con distintos tonos de color
verde por fuera y con una pulpa de color rojo intenso en su interior, de carne muy dulce y con numerosas semillas negras,
marrones o blancas, muy ricas en vitamina E, que también se utilizan en medicina y que se
pueden consumir tostadas como alimento.
En España fue introducida por los árabes y aunque se cultiva en toda la península, las mejores se dan en Andalucía y en las de la zona de Levante. Es una fruta típica de verano porque florece entre junio y julio (verano boreal) y madura sólo 40 días después de su floración.
La sandía es la fruta que más
agua contiene (casi un 93% de su volumen) y un 7% de azúcares, siendo una buena
fuente de vitamina C, por eso es muy habitual consumirla en dietas para perder
peso. 100 gramos de sandía contienen 80 mg de potasio, 11 mg de magnesio, 46
gramos de hidratos de carbono, 0,5 gramos de fibra y 20,5 calorías, además de muchos
otros beneficios nutricionales:
- Contiene una gran cantidad de L-citrulina y después de consumir varios kilos, se obtiene una elevada concentración de este elemento en nuestro plasma sanguíneo ayudándonos a relajar los vasos capilares, además de metabolizar arginina, muy positivo en enfermos de corazón y con hipertensión. Además, es perfecto tomar sandía después de hacer un enorme esfuerzo, pues gracias a la L-citrulina, alivia de manera espectacular la fatiga muscular.
- Ese atractivo color rojo es debido a su alta concentración en antioxidantes, ideal para prevenir el envejecimiento y mantener en estado óptimo nuestros tejidos.
- Su alto contenido en fibra elimina elementos tóxicos de nuestro organismo, limpiando nuestros intestinos.
- Gracias al licopoteno, nos protege frente a determinados tipos de cáncer.
Dicen además, que una buena
tajada de sandía puede tener los mismos efectos que la Viagra, gracias a su
compuesto de L-citrulina, pues éste promueve la correcta circulación de la
sangre en todas las partes del cuerpo, relajando los vasos sanguíneos y
favoreciendo así la disfunción eréctil. El único problema es que la L-citrulina
se encuentra en mayor concentración en la corteza de la sandía, así que si
queréis mejorar vuestra vida sexual y aumentar la libido, ya sabéis lo que
tenéis que hacer… Jajaja!
Ingredientes del gazpacho clásico |
La receta de hoy no puede ser más
sencilla. Más aún si estás acostumbrad@ a hacer gazpacho. Y es que para conseguir
este gazpacho de sandía basta incorporar todos los ingredientes que componen la
receta y triturarlos con ayuda de la batidora. Podéis tomarlo solo o bien acompañado de cualquier guarnición tipo virutas de jamón, trozos de verduras bien
picaditas, etc.
Y dicho esto, ¡vamos con ello!
INGREDIENTES
(4 vasos aprox.):
600 gramos tomates rojo en rama
500 gramos sandía (sin pepitas)
35 gramos cebolla (1/4)
40 gramos pimiento verde (1/2)
50 gramos pan duro
1 pepino pequeño
½ diente ajo
100 ml. aceite oliva
30 ml. vinagre
Sal al gusto
- Poner el pan duro en remojo, con agua fresca.
- Lavar y trocear las verduras (tomates, cebolla, pimiento y pepino).
- Pelar el ajo, cortarlo por la mitad y extraer el germen para que no repita.
- En un vaso de triturar, incorporar la sandía en trozos y ya sin pepitas, los tomates, la cebolla, el pimiento verde, el pepino, la mitad del ajo y el trozo de pan ya remojado. Añadir un poco de sal, un poco de vinagre y triturar con ayuda de la batidora.
- Por último, añadir el aceite de oliva poco a poco y seguir batiendo hasta que el puré obtenga una textura untuosa. Añadir un poco de agua fría si quedara demasiado espeso. Rectificar de sal y/o vinagre si fuera necesario.
- Pasar el puré de tomate y sandía por el chino o por un colador de malla fina para que el gazpacho obtenga una textura final muy fina.
- Dejar enfriar en el frigorífico al menos un par de horas y servir muy frío.
¡Buen provecho! Que lo disfrutéis...
P.D.: Recordad que El Especiero de Patricia seguirá publicando todos los martes y viernes de cada semana. ¡No me falléis!
Menudas vacaciones!!! Me encanta volver a recibir tus publicaciones. Tere
ResponderEliminarQue alegría!! Cuéntanos que tal tu verano! Pilar
ResponderEliminarMe encanta el gazpacho de sandía. También lo he probado de cerezas. Rita
ResponderEliminarHola Rita!! Pues pásanos tu receta. Tiene buena pinta...
EliminarEchaba dd menos tus publicaciones. Pensaba que ya no volverías.. Paz
ResponderEliminarUfff parece que ha pasado un siglo. Encantada de leerte de nuevo. Miriam
ResponderEliminarNo he probado ese gazpacho pero me encanta la sandía y puede quedar muy bueno. Olga
ResponderEliminarEse gazpacho está increible. Yo lo hago y al final lo decoro con unas hojas de menta. Pruébalo! Te gustará. Marta L.
ResponderEliminarOído cocina, Marta. No se me había ocurrido poner unas hojas de menta encima, pero creo que ese aroma final puede quedar estupendo. Gracias por la recomendación!
EliminarQué guay que vuelva el especiero!! Menudo pintón!!
ResponderEliminarSe ve con una pinta increíble!! Pero no es demasido dulce?? Marta
ResponderEliminarMarta, el sabor de este gazpacho es muy original. Tiene un ligero sabor dulce, pero le queda realmente bien. Pruébalo! Te sorprenderá...
EliminarComo me gusta el gazpacho! Este vrano lo he probado con uvas y también esta super bueno. Raquel
ResponderEliminarRaquel, paece que este año están de moda los gazpachos frutales. Desde luego con uvas también debe quedar buenísimo!
EliminarMe alegro de que hayas vuelto Patricia! Nos alegras la mañana! Paloma
ResponderEliminarMe encantan los gazpachos diferentes. Yo hago uno añadiendo un poco de aguacate que queda perfecto. Sonia
ResponderEliminarSonia, yo también he oído hablar del gazpacho con aguacate. Supongo que la textura y sabor serán súper suaves... Comparte con nosotr@s la receta!
EliminarQué alegría que hayas vuelto! Ana M.
ResponderEliminarEstupenda receta! Miriam
ResponderEliminarComo mola que hayas vuelto! Encantada de volvver a leerte.
ResponderEliminarMuchas gracias a tod@s por vuestros comentarios. Estoy encantada de volver. Y más sabiendo que seguís ahí...
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