viernes, 4 de diciembre de 2015

SOPA DE PESCADOS Y MARISCOS


CONSEJOS. Me río yo de los consejos para no ganar kilos en Navidad. Si echáis un vistazo en la sección de salud en los periódicos durante estas fechas, encontraréis un montón de artículos “super interesantes” dando consejos acerca de cómo evitar coger esos kilos de más que suelen instalarse alrededor de nuestro cuerpo durante las fiestas. En general, estos artículos cuentan que para mantener “la línea navideña” debemos beber mucha agua, intentar llevar una vida ordenada, no dejarnos caer en la tentación del dulce, comer equilibrado y sobre todo, no cometer excesos. ¿Están de coña, no? ¿Pero alguien se cree que cualquiera de los mortales, durante las fiestas de Navidad va a evitar el vino y el champán o el cava para sustituirlo por un enorme vaso de agua? O con el trajín de horarios, compras y de invitados que supone la llegada de la Navidad, ¿vamos a poder permitirnos comer a las dos de la tarde y cenar a las nueve para seguir manteniendo nuestra rutina alimenticia? E incluso, ¿alguien es capaz de no probar un trozo de turrón ni tampoco un polvorón aunque haya bandejitas hasta los topes repartidas por toda la casa? ¡Seamos serios, por favor! Navidad es igual a excesos y el que no lo entienda así es que no sabe lo que significa esta palabra.




Para más inri, la llegada de las comilonas navideñas implica un esmero aún mayor por parte de l@s cocinillas, que se pasan buena parte de las fiestas preparando deliciosas recetas que llevan incorporadas toda clase de ingredientes “prohibidos” en otras fechas del calendario. A esto debemos sumar las famosas comidas de empresa y las cenas con amig@s a l@s que no solemos ver muy a menudo y que durante estas fechas se convierten en la excusa perfecta para disfrutar de su compañía. Así que, ¡no intentemos engañarnos! Dicen algunos expertos que durante las fiestas navideñas solemos engordar unos 3 kilos de media. Traducción: en tan sólo unos días llegamos a consumir absolutamente las mismas calorías que comeríamos por ejemplo, durante una semana completa en cualquier otro momento del año. Así que durante las navidades, además de los excesos que cometemos con los dulces y las bebidas alcohólicas, hay que sumar también la asistencia a numerosas comidas y cenas copiosas, a las que nuestro organismo no está habituado el resto del año. La Navidad consigue relajar nuestros hábitos diarios, nos obliga a trasnochar y a descansar menos de lo que deberíamos y también a visitar más los restaurantes y establecimientos de ocio donde es imposible no picar entre horas, así que con semejante cartel, ¿quién puede permitirse no engordar ni un gramo?




Creo que acabo de tirar por tierra la mayor parte de los contenidos de los artículos de los que os hablaba al comienzo del post (con toda la intención, por cierto). Mi consejo: disfrutar al máximo de estas Fiestas, con polvorón y copita de cava incluidos. Objetivo: ¡Ser felices estos días! Porque para eso están las navidades, para eso está el cuidado que ponemos en nuestra alimentación durante el resto del año y porque como dice el dicho popular ¡que nos quiten lo bailao! No obstante, por si os sirve de ayuda, os traigo una serie de recomendaciones que podéis seguir durante las fiestas y que nunca están de más:
  1. Cuidado con las cenas copiosas. Irse a dormir justo después de haber ingerido gran cantidad de alimentos, habiendo bebido además alcohol, no es aconsejable para el organismo. Por eso, después de cenar, aprovecha estas fiestas para quedarte unas horas más jugando a algún juego en familia, charlando animadamente o incluso cantando villancicos. Otra forma de asegurarte de que no te vas a cenar e irte a dormir es cenar temprano. No hay que esperar hasta las once de la noche para cenar en Nochevieja. Es mejor cenar antes y tomárnoslo con calma.
  2. Planificar las comidas antes de las fechas importantes. Esto reducirá nuestro nivel de estrés. Tenerlo todo o casi todo controlado (selección del menú, compras…) ayudará a que estemos tranquilos y a que nos tomemos las fiestas con mucha más calma. Comprar lo necesario y no dejarnos llevar por impulsos es cuestión de organización y si sois previsores conseguiréis ahorrar algo de vuestro presupuesto navideño.
  3. Contra la tentación de los dulces poco se puede hacer durante estas fechas, pero hay que tener en cuenta que es mejor tomarlos durante el día y no por la noche.




Hoy os traigo un primer plato muy solicitado en las cenas de Navidad: sopa de pescado y mariscos. Esta sopa conseguirá que entremos en calor, es muy ligera, suave y además, servirá "para abrir boca" y de esta forma continuar con el resto del menú. Por supuesto, en la elaboración de la receta podéis utilizar un buen caldo de pescado ya preparado o envasado, pero tratándose de una cena especial, lo suyo es currárnoslo y preparar un estupendo fumet de pescado casero, en el que utilizaremos algunas verduras y espinas y cabezas de pescados blancos (como merluza, rape...). Debéis tener cuidado de no cocinar en exceso el fumet (nunca más de 10-15') pues pueden aparecer malos olores y sabores en el caldo por exceso de cocción

¿Nos ponemos con ello?

INGREDIENTES:
Para un litro y medio de caldo de pescado:
1 puerro 
2 zanahorias
1 tomate
Una rama apio
Una hoja laurel
Cabezas y espinas de pescados blancos
Cabezas de gambas
Aceite de oliva
1 litro y medio agua

Para la sopa de pescado: 
1/2 kilo almejas
1/2 kilo mejillones
400 gramos gambas
Unos trozos rape
1 cebolla
1 diente ajo
1 zanahoria
1 tomate
1 puerro
2 pimientos choriceros
2 rebanadas de pan
Un poco perejil fresco picado
1 litro y medio de caldo pescado
Sal
Pimienta 
Aceite de oliva


PREPARACIÓN:

  • Pelar la gambas y reservar las cabezas (sin las barbas) para incluirlas en el fumet.
  • Para preparar el fumet de pescado, en primer lugar, lavar, pelar y cortar en trozos el puerro y las zanahorias. El tomate (con piel y pepitas), partirlo en trozos. En una olla grande y a fuego medio, calentar un chorrito de aceite de oliva y comenzar a rehogar las verduras (puerro, zanahorias y tomate). Transcurridos unos minutos, incorporar las cabezas de gambas, que aplastaremos para que salgan los jugos que hay en su interior. A continuación, añadir las cabezas y espinas de merluza y/o rape y seguir rehogando un poco más. Por último, añadir la rama de apio, la hoja de laurel y un litro y medio de agua. NO ECHAR NI UNA GOTA DE SAL. Cuando comience a hervir, bajar el fuego al mínimo y dejar cocer por espacio MÁXIMO de 12-15'. Después, colar el caldo resultante con ayuda de un chino o colador. Ya tenemos listo el caldo de pescado.
  • En una sartén a fuego medio/alto, calentar un buen chorro de aceite y freír un par de rebanadas de pan hasta que estén bien doradas.
  • Lavar, pelar y picar pequeño el resto de verduras (cebolla, ajo, zanahoria, puerros). El tomate, pelarlo y despepitarlo (cortándolo por la mitad y estrujándolo con la mano suavemente para que salgan las pepitas y el exceso de agua) y picarlo también.
  • Lavar los pimientos choriceros y quitarles las pepitas.
  • Mientras, para cocer los mejillones y las almejas, en dos cazos diferentes y a fuego alto, calentar un par de dedos de agua y cocinar, por un lado las almejas y por otro los mejillones. Cuando el agua empiece a hervir, incorporar las conchas, tapar y esperar unos minutos hasta que se abran (no tarda más de 2-3'). Una vez abiertas, reservar un poco de agua de la cocción de ambos moluscos para justo al final, añadírselo a la crema de pescado.
  • Para preparar la sopa de mariscos, en una olla grande y a fuego medio, calentar un chorrito de aceite y comenzar a rehogar las verduras durante unos minutos. Añadir en trozos los pimientos choriceros (sin necesidad de hidratarlos primero) y las rebanadas de pan frito. Incorporar el caldo de pescado y dejar cocinar a fuego lento por espacio de 6-8'. Transcurrido el tiempo, apartar la olla del fuego y batir con ayuda de la batidora hasta que obtengamos una crema o sopa oscura y con consistencia. 
  • Poner de nuevo la olla en el fuego y cuando la sopa se caliente añadir las gambas crudas y los trocitos de rape (que se harán con ayuda del calor) y dejar cocinar un par de minutos más a fuego lento. Al final, añadir los mejillones y las almejas (con o sin cáscara, como prefiráis) y también un poco del caldo de cocción de las mismas.
  • Emplatar muy caliente y decorar con un poco de perejil fresco picado.

¡Salud! Que lo disfrutéis...

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8 comentarios:

  1. Muy adecuada en estas fechas. A mí me encanta, aunque particularmente es un plato que una de dos, o gusta mucho o no gusta nada. Me apunto la receta. Tiene muy buen aspecto. Lucía

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  2. Que rica!!!! En mi casa se hace mucho, pero en crema, sin trozos de pescado. Está buenisima! Mar

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  3. Soy enamorada de las cremas y sopas. Es un primer plato estupendo y en Navidad más. Ligero y justo xa disfrutar después de un buen trozo de carne o pescado. Tere

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  4. Defensora total del fumet de pescado casero en las ocasiones especiales. El envasado, para el día a día. Buenísima pinta!!! Maite

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  5. Una sopa o un caldo no pueden faltar en Navidad. Me parece estupenda como primer plato de la cena de Nochebuena. Quizás me apunte. Lola

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  6. Tienes razón, menudo lío se forma en Navidad. Me gusta mucho la receta de hoy. Eva

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  7. Excelente receta! Me encantan las sopas de pescado. En crema tb están muy ricas. Sara

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  8. Muchas gracias por vuestros comentarios! La sopa de pescado es una opción perfecta en Navidad, pues nos permitirá llegar al plato principal sin sentirnos excesivamente pesados. Probadla y comprobaréis que tiene un sabor espectacular!

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