viernes, 10 de junio de 2016

FLAN DE NARANJA


VARIEDAD. Que nadie puede resistirse a un flan casero es un hecho, porque además de ser muy nutritivo es un postre ligero, suave y está buenísimo. Pero si además añadimos algún ingrediente con el que consigamos darle un toque diferente, mejor que mejor. Y si ese toque se lo damos con sabor a naranja, ¡ya ni digamos! Al final, de lo que se trata es de no aburrir al personal y por qué no, también a uno mismo. Hay flanes de huevo de un montón de sabores (vainilla, coco, chocolate, café, etc), pero me da que hoy voy a llevarme el premio a la más original porque seguro que muchos de vosotr@s no habéis probado todavía el flan de naranja. Y es que ahora, con la llegada del calorcito, ¿a quién no le apetece disfrutar de un buen vaso de zumo de naranja frío o de una refrescante limonada? Los sabores de las frutas cítricas son un excelente alimento para nuestro organismo. Pero, ¿sabéis qué propiedades nutricionales aportan al organismo?



En general, las frutas cítricas suelen ser de colores brillantes, aromáticas y muy peculiares. Tienen su origen en la Asia tropical y subtropical y son reconocidas mundialmente por su alto contenido en vitamina C y ácido cítrico, que las convierte en una valiosa fuente de salud para el ser humano.

Los cítricos pertenecen a la familia de los "citrus", cuyos frutos poseen un característico sabor ácido, siendo muy ricos en aceites esenciales. Los cítricos son muy apreciados en todo el mundo no solamente para su consumo sino por su utilización en las industrias farmacéutica y perfumística e incluso se utilizan como biocombustibles. Existen muchas variedades de cítricos pero las más conocidas son la naranja dulce y agria, el limón, la mandarina, el pomelo y la lima.

Los nutrientes más importantes que aportan al organismo son:
  1. Resultan una fuente natural de vitaminas y minerales. Comer cítricos es una manera muy fácil de obtener altas concentraciones de vitaminas A, B1, B2 y C, potasio, cobre y azúcar, consiguiendo revitalizar el organismo, fortalecer los tejidos, prevenir resfriados e infecciones de la mucosa, estimular secreciones glandulares y equilibrar la tensión arterial.
  2. Protegen el sistema digestivo. Los cítricos desinfectan las vías digestivas, ayudan en la disolución de los alimentos, alivian la acidez estomacal y favorecen la cicatrización de las úlceras del duodeno y el estómago.
  3. Controlan los niveles de colesterol y ácido úrico. Los cítricos son excelentes para bajar los niveles de colesterol y el ácido úrico en sangre, además de prevenir el desarrollo de problemas circulatorios, afecciones cardíacas y enfermedades como la gota, que provoca terribles dolores en las articulaciones.
  4. Piel bella y saludable. Las vitaminas y aceites esenciales de los cítricos son excelentes para la piel. Consumirlos a diario, sobre todo en ayunas, contribuye a la limpieza, hidratación y embellecimiento de la epidermis.
  5. Previenen y curan la diabetes. Los cítricos estimulan el funcionamiento del páncreas y regulan los niveles de azúcar en sangre, controlando las hipoglucemias.
  6. Activan el sistema inmunológico. Consumir cítricos ayuda a reforzar nuestras defensas naturales, aumentan la resistencia contra infecciones y mantienen el sistema inmune activo para cada ocasión.
  7. Desintoxican el organismo. Los cítricos ayudan a eliminar todas esas sustancias tóxicas que incorporamos del ambiente y que tienden a acumularse en nuestros tejidos provocando cansancio, afectaciones en diferentes órganos e incluso la aparición de tumores malignos. La mandarina, por ejemplo, es capaz de eliminar el plomo, mercurio, cadmio y cromo que se hallan en la sangre.
  8. Depuran nuestros órganos. La acumulación de sustancias en determinados órganos como los riñones, la vesícula y el hígado da como resultado la formación de cálculos biliares y renales, congestiones hepáticas y muchas otras enfermedades molestas y dolorosas. Los cítricos previenen estas afecciones, ya que son capaces de depurar los órganos y de regenerar los tejidos.
  9. Ayudan a perder peso. Los cítricos favorecen la quema de grasas y la limpieza del organismo, debido a sus propiedades diuréticas y laxantes.



Algunas recomendaciones a la hora de consumir los frutos cítricos son:
  1. Se recomienda su consumo siempre antes del mediodía, pues es cuando son realmente beneficiosas para el organismo.
  2. La naranja y la mandarina son frutas que deben comerse solas, de lo contrario pueden ocasionar problemas digestivos.
  3. Los cítricos en general son "oro por la mañana, plata al mediodía y plomo por la noche". Pesadez, insomnio y ciertos problemas gástricos son experimentados por personas que consumen cítricos de noche. El alto nivel de acidez y la cantidad de fructosa los convierten en alimentos que es preferible tomar durante el día.
  4. Evita mezclar cualquier fruta cítrica con el limón, pues puede ocasionar anemia y problemas como la hemoglobina.
  5. ¡Cuidado con la mezcla de naranja y zanahoria! pues juntas elevan la acidez estomacal, causan reflujo y afectan al hígado y el sistema renal.
  6. Tomar cítricos entre horas o aislados, sin consumir a la vez otros alimentos no ácidos puede favorecer el desarrollo de caries. La combinación de azúcares y de sustancias ácidas favorece una mayor erosión de la dentina. Se estima que la posibilidad de tener problemas de caries se triplica cuando se toman cítricos, en comparación con la ingesta de otros alimentos que no son de naturaleza ácida o azucarada.
  7. La ingesta de determinados cítricos  interfiere en la acción de terminados fármacos y, en consecuencia, en el proceso terapéutico. El pomelo, por ejemplo, reduce la eficacia si se toma de forma conjunta con antihistamínicos, medicamentos anticancerígenos, en tratamientos de hipertensión arterial e incluso con algunos antibióticos.
¡Vamos con la receta!

INGREDIENTES:
Para el flan:
3 huevos enteros + 6 yemas huevo
500 ml. leche entera
200 gramos azúcar (si te gusta menos dulce, incorporar menos cantidad)
2 naranjas (200 ml. zumo)
1 vaina vainilla
1 cucharada esencia azahar (opcional)

Para el caramelo:
100 gramos azúcar blanquilla
Unas gotitas agua


PREPARACIÓN:
  • Precalentar el horno a 180ºC e introducir una fuente grande con suficiente agua para poder introducir el molde del flan.
  • Lavar las naranjas. Cortar con ayuda de un cuchillo unos trozos de piel de una de las naranjas, que ayudarán a aromatizar la leche. Por otro lado, rallar un poco de la piel de la otra naranja, que añadiremos a leche una vez colada y aromatizada. Por último, exprimir las dos naranjas, colando el zumo obtenido.
  • Para preparar el caramelo, en una sartén a fuego medio, añadir el azúcar y unos gotitas de agua que ayuden a disolver el azúcar, que comenzará a cambiar de color a medida que vaya convirtiéndose en caramelo. Estará hecho cuando obtenga un ligero color dorado (no debéis dejarlo demasiado tiempo al fuego porque cuando el caramelo tome un color marrón oscuro sabrá a quemado).
  • Añadir el caramelo al molde, cubriendo el fondo del mismo. Reservar hasta que se enfríe.
  • Para preparar el flan, primero debemos aromatizar la leche. En un cazo, a fuego medio, poner a calentar la leche con los trozos de piel de naranja y la vaina de vainilla abierta por la mitad. Justo antes de que comience a hervir, retirar el cazo del fuego y reservar hasta que se atempere. Colar la leche aromatizada, añadir la ralladura de naranja y unas gotas de esencia de azahar (opcional).
  • En un bol grande, añadir los 3 huevos enteros, separar yemas y claras del resto de huevos y añadir las 6 yemas de huevo. Incorporar el azúcar, el zumo de naranja y la leche infusionada. Mezclar todo bien con ayuda de unas varillas.
  • Añadir la mezcla a la flanera e introducir en el horno, dentro del agua, para que el flan se hornee al baño María durante unos 50’. Sabremos sque está hecho cuando al introducir un palillo en el centro éste sale limpio.
  • Si el flan se pusiera muy dorado por encima durante la cocción, los últimos minutos podemos cubrirlo con un trozo de papel de aluminio.
  • Una vez listo, sacar la flanera del agua y dejar enfriar a temperatura ambiente. Una vez frío introducir en el frigorífico durante unas horas.

¡Salud! Que lo disfrutéis...

Image and video hosting by TinyPic

9 comentarios:

  1. Que especial, no? Me encanta el flan y con sabor naranja debe estar buenísimo. Clara

    ResponderEliminar
  2. Ummmmmm, super receta. Miriam

    ResponderEliminar
  3. Me encantan los flanes con otros sabores y este en especial. Tengo que probarlo! Rita

    ResponderEliminar
  4. A mis hijos les encanta el flan y nunca se lo he hecho con con naranja. Seguro que les va a gustar! Paloma

    ResponderEliminar
  5. En la variedad está el gusto. Buena pinta! Lourdes

    ResponderEliminar
  6. Aspecto formidable. Sin duda tengo que probarlo. Qué bueno. Eva

    ResponderEliminar
  7. Qué original. No lo he probado nunca, pero me encanta la naranja. Su sabor y su aroma son únicos. Habrá que probarlo. Paula

    ResponderEliminar
  8. El flan es mi postre favorito. Lo he probado de chocolate, de cafe y de coco pero no de naranja. Ganas de probarlo. Elena T.

    ResponderEliminar