TARTA TRES LECHES

DESCUBRIMIENTO. ¿No os pasa a veces que cuando descubrís un postre que os enamora en un restaurante, cada vez que pensáis en salir a cenar os molaría volver una y otra vez solo para poder disfrutarlo de nuevo? Eso me pasa a mí con la tarta 3 leches. Pero claro, ¿cómo explicarle a tu pareja o a tus amigos que quieres repetir una y otra vez en el mismo sitio sólo porque te apasiona uno de los postres que hay en su menú? Pues me temo que la única solución para no aburrir al personal es tirar de Internet y hacerte con una buena receta que te permita disfrutar de ese postre cuando te apetezca. Descubrí esta impresionante tarta en “Tepic”, mi restaurante mexicano preferido en Madrid. Y no solo por los postres. Siempre que tengo mono de comida mexicana es allí donde me dirijo y os lo aconsejo 100%, porque puedo asegurar que nunca defrauda. 

La tarta o torta tres leches es un postre muy tradicional en la cultura latinoamericana (Nicaragua, Venezuela, Panamá, Colombia, Perú, Chile, Ecuador, Costa Rica, Puerto Rico, República Dominica y México). Como su propio nombre indica, consiste en un bizcocho bañado con tres tipos de leche: leche evaporada, crema de leche y leche condensada. Suele acompañarse con un merengue hecho de claras de huevo, con cerezas al marraschino (guindas rojas) y además, puede espolvorearse con un toque de canela en polvo. Generalmente, la receta no contiene mantequilla y justamente por eso tiene una textura tan esponjosa. La decoración puede variar dependiendo de la región y se puede utilizar el fondant, el chantilly o el merengue. También se puede preparar en diferentes versiones, agregando chocolate a la decoración o cajeta (dulce de leche elaborado a partir de leche de cabra) a la mezcla de las tres leches. El éxito de esta tarta se basa en el sabor de la crema de leches y en la humedad exacta del bizcocho. Esto se logra con el balance perfecto entre sabor y humedad, sin que el bizcocho se rompa o se desmorone. Existen diferentes versiones de la tarta tres leches, como la cuatro leches, a la que se le agrega dulce de leche o leche entera y la cinco leches, a la que se añade leche de coco o de almendras.

Sobra decir que el ingrediente fundamental en esta receta es la leche, alimento muy controvertido en los últimos tiempos porque más de un experto la ha terminado poniendo en entredicho. Es más, en muchas investigaciones se ha llegado a preguntar: la leche, es ¿beneficiosa o perjudicial para la salud? 

Lo extraño de todo esto es que hasta hace unos años, los beneficios de la leche siempre habían sido exaltados por médicos y nutricionistas, por estar considerada unos los alimentos más nutritivos y completos que existen. Sin embargo, estudios recientes alertan sobre los supuestos perjuicios de consumir leche en exceso, llegando incluso a afirmarse que la leche es imprescindible en los lactantes y no tanto en los adultos. Un estudio hecho en los Estados Unidos por la Physicians Committee for Responsible Medicine (PCRM) ha llegado a las siguientes conclusiones:

1. Tomar tres vasos de leche al día no aporta la cantidad mínima recomendada de calcio, un objetivo que sí se alcanza con otros alimentos más nutritivos.
2. Las proteínas y el calcio de la leche de origen animal son difícilmente asimilables por los seres humanos, ya que está biológicamente concebida para amamantar a los animales de la misma especie.
3. Posee un alto contenido en calorías y grasas saturadas, cuyo consumo, en exceso, puede llegar a provocar diabetes tipo 1.
4. Contiene grandes porcentajes de intolerancia a la lactosa, tipo de azúcar que se encuentra en la leche y sus derivados. Para ser digerida adecuadamente se necesita tener en el intestino una cantidad suficiente de una enzima denominada lactasa. La deficiencia de esta enzima es cada vez más frecuente entre la población, de hecho, en nuestro país ya afecta a una de cada tres personas.
5. Contiene aditivos químicos. Las explotaciones lecheras intensivas usan generalmente piensos para alimentar a las vacas que contienen hormonas de crecimiento y antibióticos.
6. Es culpable de muchos tipos de alergias. Las reacciones alérgicas  a la leche y sus derivados  pueden ir desde vómitos hasta consecuencias mucho más graves para la salud, como arritmias y colapso vascular.
7. No es el único alimento que contribuye al fortalecimiento de los huesos. La cantidad de calcio absorbida por el cuerpo no solo depende de los alimentos, sino de otros factores como por ejemplo los genes, el ejercicio físico y la obtención de la vitamina D mediante la exposición a los rayos solares, que son otros remedios para sortear la osteoporosis. Alimentos que tienen importantes cantidades de calcio y son muy saludables son los frijoles, el tofu, el brócoli, la col rizada, los cereales o el zumo de naranja.

Lo cierto es que a día de hoy esto es lo que hay, aunque bajo mi punto de vista la leche y sus derivados (sin ser consumida en exceso, por supuesto) son un alimento más que completo y fuente indiscutible de calcio, fósforo, magnesio y proteínas, esenciales para el desarrollo del crecimiento, para mantener los huesos fuertes y para prevenir la osteoporosis en la edad adulta. Además, si no se tienen problemas de intolerancias, consumir cantidades moderadas de lácteos es muy importante para el desarrollo y el crecimiento de los niños.

Y dicho esto, aquí os traigo mi propia versión de la receta de la tarta tres leches, que decoraré con un capa de merengue por encima y unos frutos rojos, para darle un toque de color. Debéis tener en cuenta que esta tarta debe quedar muy esponjosa y demás, bien "mojada" con las tres leches, así que no os de miedo empaparla bien, pues así es como queda más rica.

INGREDIENTES:

Para el bizcocho:

5 yemas huevo

5 claras huevo

200 gramos azúcar blanquilla

150 gramos harina

70 ml. leche

1 sobre levadura (16 gramos)

1 cucharadita esencia vainilla

Para la crema tres leches:

200 ml. nata líquida para montar

250 ml. leche condensada

350 ml. leche evaporada

Para decorar con merengue:

4 claras de huevo

2 cucharadas azúcar

1 poco de canela para decorar

PREPARACIÓN:

• Precalentar el horno a 180 grados.
• Engrasar un molde mediano con mantequilla y un poco de harina para que no se pegue cuando esté en el horno.
• En un bol, incorporar las yemas de huevo, la mitad del azúcar, la esencia de vainilla y mezclar bien con la batidora y el accesorio de las varillas, hasta que las yemas estén blanquecinas.
• En otro bol, añadir las claras de huevo junto a la otra mitad del azúcar y con la ayuda de la batidora y las varillas, montar a punto de nieve.
• Verter las claras montadas sobre la mezcla de yemas con movimientos envolventes, con ayuda de una espátula o cuchara de madera.
• Tamizar la harina y la levadura sobre la mezcla, poco a poco (removiendo lo menos posible) hasta que se integren bien todos los ingredientes.
• Verter la masa dentro del molde y hornear durante 35-45’ (dependerá de la intensidad de cada horno). El bizcocho estará perfecto cuando al introducir un palillo en el centro, éste salga limpio. Es importante no tostarlo demasiado (para que no se endurezca), así que si comienza a coger color, colocar un trozo de papel de aluminio encima.
• Mientras, preparar las 3 leches, añadiendo las tres variedades de leche en un bol, batiendo con ayuda de unas varillas hasta que queden totalmente integradas.
• Cuando el bizcocho esté listo, sacar del horno y dejar templar unos minutos. Después, desmoldar en una bandeja y pincharlo varias veces con un tenedor o cuchillo por encima (para que así absorba mejor el líquido). Verter sobre éste las 3 leches, esperando a que se absorba bien.
• Cubrir el bizcocho con un film transparente y reservar en el frigorífico mínimo un par de horas (yo aconsejo hacerlo la tarde antes para poder mantenerlo una noche en el frigorífico).
• Para preparar el merengue, batir las claras de huevo y el azúcar a punto de nieve con ayuda de la batidora y del accesorio de varillas. 
• Para emplatar, decorar el bizcocho con el merengue. Para decorar podéis espolvorear un poco de canela por encima y añadir unas frutas.

¡Salud! Que la disfrutéis...